lunes, 31 de agosto de 2015

DESCOLONIZAR EL PENSAMIENTO CRÍTICO Y LAS REBELDÍAS.

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Zibechi considera que los movimientos anti-sistémicos autonómicos comenzaron una nueva era de las luchas sociales o de clases que está en sus primeras fases. Esta nueva era es la de la autoconstrucción de un mundo, sin necesidad de pasar por la toma del poder estatal, concentrándose en los territorios donde se construyen estos nuevos mundos. El caso más evidente es el de los caracoles zapatistas, donde se han construido formas de poder supracomunitario, como las Juntas de Buen Gobierno que reúnen a cientos de comunidades cada uno (aunque el confederalismo en el Kurdistán muestra también una experiencia inédita en esta conflictiva región del mundo). La experiencia zapatista –afirma Zibechi– es un logro histórico que nunca antes había existido en las luchas de los de abajo, exceptuando los 69 días que duró la Comuna de París y los breves tiempos de los soviets antes de la reconstrucción estatal estalinista.


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DESCOLONIZAR EL PENSAMIENTO CRÍTICO Y LAS REBELDÍAS.
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Gilberto López Rivas.

La Jornada lunes 31 de agosto del 2015.

La construcción de otro mundo en América Latina, acorde con Raúl Zibechi, se está llevando a cabo por medio de organizaciones no estadocéntricas ni jerarquizadas, que a veces ni siquiera tienen equipos permanentes de dirección y, en consecuencia, tienden a superar la burocracia, una forma tradicional, elemental y muy antigua de dominación. En estos nuevos “modos de hacer”, las mujeres y los jóvenes juegan un nuevo papel.

En un primer momento de crítica a los gobiernos progresistas, Zibechi identifica que, pese a las diferencias, todos los procesos tienen en común la continuidad del modelo extractivo, ya sea minería a cielo abierto, hidrocarburos o monocultivos. “En todos los casos se trata de la producción de commodities, el modo que hoy asume el neoliberalismo en la región”, así como la expansión de políticas sociales que buscan neutralizar a los movimientos y amortiguar o impedir el conflicto.

“El mapa de los gobiernos progresistas y de izquierda habría que completarlo estableciendo una diferencia entre aquellos países en los que la acción social hizo entrar en crisis el sistema político, como Venezuela, Bolivia y Ecuador, y aquellos como Brasil y Uruguay, donde ha predominado la estabilidad, estando Argentina en una situación intermedia”.

Al interrogante sobre los principales peligros y beneficios que implica la llegada al gobierno de partidos progresistas, Zibechi hace un señalamiento, a mi juicio trascendente, y a partir de tres escenarios:

“Las relaciones interestatales, o sea, la cuestión de los gobiernos, la relación entre movimientos y estados, es decir, la cuestión de la emancipación y la relación entre el desarrollo y el buen vivir, esto es, el posdesarrollo. Si miramos la cuestión estatal, la existencia de gobiernos progresistas es muy positiva, porque en ellos se juega la relación con Estados Unidos y con las grandes multinacionales del norte, la crisis de la dominación imperialista que estos gobiernos acentúan. Pero, si observamos la cuestión de la emancipación o del desarrollo, estos gobiernos han representado un paso atrás. El problema es que hay fuerzas sociales y políticas que no pueden tener otro horizonte más que ser gobierno, que convertirse en administradores del Estado.”


En la especificidad de América Latina, Zibechi destaca que por un lado

“tenemos una sociedad oficial, hegemónica, de herencia colonial, con sus instituciones, sus modos de hacer, su justicia y todo eso. Por otro, hay otra sociedad que puede estar afincada en las remotas áreas rurales y se organiza en comunidades y también en las amplias periferias urbanas; que tiene otros modos y formas de organizarse; que tiene su propia justicia, sus formas de producción y toda una organización para tomar decisiones paralelas o al margen de la establecida”.

Nuestro autor sostiene que la práctica indígena cuestiona las concepciones revolucionarias occidentales en varios aspectos y denuncia que sólo lo estadocéntricos es teorizable, coincidiendo con autores como Leopoldo Mármora, quien a mediados de los años ochenta hacía notar las raíces eurocéntricas del marxismo en el tratamiento de la cuestión nacional y en el concepto de “pueblos sin historia”.

“Hay varios temas que el movimiento indio pone sobre la mesa. El primero es su concepción del tiempo, la relación presente-pasado. El segundo es la idea de cambio social o revolución, el Pachakutik… El tercero se relaciona con el racionalismo y con la relación entre medio y fines, que involucra las ideas de estrategia y táctica, así como la cuestión del programa y del plan”.

En todos estos temas y procesos, el papel del intelectual es importante. Zibechi rehúsa definirse como intelectual, aun en los términos en los que los plateaba Lenin e incluso Gramsci, y prefiere ser llamado activista/militante y pensador/educador, que en todo caso no deja de ser intelectual. Sostiene, acertadamente, que muchas de las ideas de quienes trabajamos en los movimientos son patrimonio de mucha gente.

“Si el centro es la gente en movimiento, entonces el intelectual tiende a ser uno más en el movimiento… Por eso los intelectuales también nos debemos poner en movimiento y movernos del lugar ese de estar por encima de la gente”.

Zibechi considera que los movimientos anti-sistémicos autonómicos comenzaron una nueva era de las luchas sociales o de clases que está en sus primeras fases. Esta nueva era es la de la autoconstrucción de un mundo, sin necesidad de pasar por la toma del poder estatal, concentrándose en los territorios donde se construyen estos nuevos mundos. El caso más evidente es el de los caracoles zapatistas, donde se han construido formas de poder supracomunitario, como las Juntas de Buen Gobierno que reúnen a cientos de comunidades cada uno (aunque el confederalismo en el Kurdistán muestra también una experiencia inédita en esta conflictiva región del mundo).

La experiencia zapatista –afirma Zibechi– es un logro histórico que nunca antes había existido en las luchas de los de abajo, exceptuando los 69 días que duró la Comuna de París y los breves tiempos de los soviets antes de la reconstrucción estatal estalinista.

La reaparición del EZLN, acorde a Zibechi,

“combina posiciones históricas (entre las que habría que destacar el rechazo al escenario electoral y a la construcción de organizaciones homogéneas y centralizadas) con nuevos desarrollos que implican una relación diferente con sus bases de apoyo fuera de Chiapas y, sobre todo, un modo novedoso de intervención en los sectores populares, consistente en mostrar lo que han sido capaces de construir que, en realidad, es enseñar un camino propio y diferente para transformar el mundo”.

A juicio de nuestro autor, el discurso zapatista recupera la tradición de resistencia anticolonial defendida por Frantz Fanon, quien destaca la existencia de “dos zonas”, la del opresor y la del oprimido, “los de arriba y los de abajo”. Asimismo, Zibechi distingue al zapatismo de otros movimientos a partir de la autonomía integral, que los lleva a rechazar subvenciones y políticas sociales del gobierno; la construcción de órganos de poder en tres niveles, diferentes a las formas de poder estatales, inspirados en la comunidad; ser un movimiento de jóvenes y de mujeres, y ser consecuentemente anticapitalistas.


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domingo, 30 de agosto de 2015

LULA AVISÓ QUE VUELVE CON LA MIRA EN EL 2018. Brasil, violento y racista.

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LULA RETORNA A TIEMPO COMPLETO A LA POLÍTICA. BRASIL UN ESCENARIO LOCAL-NACIONAL DE LAS CLASES Y LA LUCHA DE CLASES: Una expresión y manifestación plena, múltiple violenta de lucha de clases; la “lucha política” concentra – intereses económicos, (la crisis del modelo y su dependencia de la crisis mundial – made in China) – derechos sociales y políticos ciudadanos; la lucha contra la corrupción, la acumulación por desposesión inmobiliaria, la defensa del medio ambiente urbano, defensa del espacio público y la propia crisis institucional) “lucha política” que viene de arriba hacia abajo – la derecha más conservadora, anti-nacional y financiero-comercial-exportadora – declaró la guerra, cubierta de odio, rencor y revanchismo a los Líderes  Políticos, así como a todo el Partido de los Trabajadores P.T. El Ataque al Partido es devastador desde la derecha y los medios de comunicación de los poderes facticos. Igualmente es persecución diaria, odio de clase, liquidación política hoy lo que realiza la derecha, sus partidos políticos, la gran prensa y las revistas especializadas contra el ex presidente Lula.- Pero no es una lucha política como expresión de la lucha de clases – en el centro de una crisis política envuelta por la tormenta destructiva, en el contexto de una crisis económica impulsada desde dentro ante el no funcionamiento de objetivos y metas   del programa de gobierno y en los últimos días “removida” en toda su estructura por el “terremoto financiero”  producido en todo el mundo por la devaluación del Yuan, moneda de la República China.

Obviamente, esta marcado, asfixiado por la campaña anti-política interna, contexto local-nacional profundamente turbulento, atravesado por la violencia “callejera”, descuartizamiento político de los Líderes del PT. Situación que se agrava, por el  descubrimiento de las mafias empresariales, en especial de la  construcción – que incluso salió del país y se internacionalizó  y la corrupción de la política – sumado a todo ello, problemas múltiples internos, que vienen  desde algunos años atrás como son los derechos constitucionales no atendidos y menos solucionados de los nuevos sectores – en especial de la juventud, en educación, sistema de salud, transporte, medio ambiente (quizás el más difícil y el de mayor significación a raíz del diario recorte de los espacios públicos y el proceso indetenible de la industria inmobiliaria) – de la nueva “clase media”, emergente y propia del país a raíz del éxito de los programas sociales y la lucha contra la extrema pobreza así como del propio crecimiento macro-económico de la última década.


Sería interesante para todo América latina – por el nivel político al cual ha llegado la democracia en los últimos tiempos – que Brasil se convierta en el eje político que irradie una “una nueva forma y superior de hacer política” – sobre todo tomando en cuenta lo que significó, el costo social y humano, los largos años de lucha, al pueblo brasileño recuperar la Democracia, después de décadas de dictadura militar – Brasil por el ser el centro mundial donde nace la oposición política organizada hacia la política dominante, el neoliberalismo en el nuevo milenio: El Foro Social Mundial de Porto Alegre, (convocatoria, reunión y asistencia mundial de los gremios, sindicatos, movimientos sociales, partidos políticos de oposición, organizaciones de Mujeres por la Democracia, Cristianos por la nueva Democracia, Campesinos sin tierra y movimientos Verdes y que en la coyuntura actual tiene vigencia, influencia y trabajo político a  nivel mundial), con plena seguridad el más grande y mundializado evento político de oposición  a las políticas neoliberales Igualmente el Foro Político de Sao Paulo (Partidos Políticos progresistas, nacionalistas, democráticos de izquierda a nivel de América Latina, en lucha contra las posiciones “políticas” hegemónicas del neoliberalismo, pero por encima de todo ello, el ser Brasil el país – ubicado en la séptima economía mundial – y escenario interno de exitosos programas sociales de lucha contra la pobreza y la  extrema pobreza – en tiempo de neoliberalismo – son más de 55 millones de pobres que salieron del mundo del silencio, la exclusión, la marginación y la explotación histórica – y hoy forman parte activa de la nueva clase media, muy activa y exigente de “nuevos” derechos sociales y políticos en América Latina.


Consideramos, que todas estas condiciones y características económico-sociales, políticas, culturales y ambientales internas de la “nueva” sociedad brasileña, nos debió deparar nuevos caminos, nuevas vías de lucha política – en un escenario nacional de las clases y la lucha de clases – donde es objetivo y real hoy, la  existencia de un nuevo Poder Popular Local – expreso, manifiesto, presente en la Nueva Sociedad Civil, Real, popular, plural, democrática, autónoma, como también escenario múltiple, complejo donde el trabajo desde lo local-popular, así como la lucha social y cultural es diaria y permanente por la forja de una Nueva Ciudadanía Multicultural, objetivos nunca terminados, pero sí siempre renovados. En los amplios y mayoritarios sectores populares y sectores medios, sí indiscutiblemente existe hoy cambios e innovaciones muy importantes, sin embargo, no se ha logrado materializar, centralizar, cristalizar social y políticamente sus derechos, compromisos y nuevas responsabilidades, no se ha sabido mantener, conservar la CONFIANZA personal, social e institucional que el pueblo les otorga, concede dentro del propio proceso de la lucha de clases, cuando se hace y desarrolla la POLÍTICA como Pedagogía, con ética, compromiso y responsabilidad, como Gobierno; pero, además es evidente que existe un marcado abandono o falta de perspectiva política que no se tuvo la lucidez para consolidar estos grandes objetivos estratégicos.

Producto de esta falta de visión política y de no implementar trabajos de carácter político institucional interno para combatir cualquier atisbo de corrupción, hoy la situación real y objetiva es sumamente complicada y turbulenta es utilizada en su mayoría por una clase dominante, tradicional y conservadora – que definitivamente nada ha cambiado en los últimos 10 años – muy por el contrario a involucionado políticamente, testimonio de ello es que su “portafolio político”, su  “programa de gobierno” si alguna vez lo tuvieron, es peor o igual que en los tiempos de la recuperación de la democracia – inicios de la década de los 90’ – porque en el centro de este “mar de contradicciones” su única, dominante e impositiva propuesta es el golpismo militarista – traerse abajo, destruir la democracia – cuando, es preciso e importante y final recordar, que a pesar de sus múltiples limitaciones el escenario de la democracia nos brinda un “gigantesco campo” para evaluar, cotejar, polemizar, discutir, crear políticas de consenso, - en el centro está precisamente un poderoso instrumento democrático como es el DIÁLOGO,  - que nos permite en democracia y con seres humanos civilizados arribar a propuestas diferentes, superiores que beneficien y consoliden el proceso Democrático.


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“Sólo matas a un pájaro si se queda quieto. Yo volví a volar otra vez”, dijo Lula.


LULA AVISÓ QUE VUELVE CON LA MIRA EN EL 2018.
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Dijo que tiene las espaldas anchas, para defender al gobierno de su sucesora Dilma Rousseff.

Página /12 domingo 30 de agosto del 2015.

En un auditorio colmado de personas en São Bernardo do Campo, la ciudad satélite de San Pablo en la que inició su carrera sindical y política, Lula defendió la reinstauración de un impuesto provisorio a los movimientos financieros.

El ex presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó ayer que decidió volver al primer plano de la política de su país para defender a su sucesora y actual jefa de Estado, Dilma Rousseff. Tras permanecer durante cinco años en un discreto segundo plano, la afirmación del ex mandatario se asocia ineludiblemente con su declaraciones del viernes, en las que aseguró que estaba evaluando volver a postularse en los comicios de 2018 para presidir el país.

El ex jefe de Estado, que estuvo acompañado por el ex presidente de Uruguay, José Mujica, afirmó ayer ante los asistentes a un seminario que ahora decidió viajar, hablar con políticos y dar entrevistas para colaborar con la presidencia de Rousseff. “Como tengo las espaldas anchas y ya recibí demasiado, veré si le dan un poco de sosiego a Dilma y me pegan a mí”, dijo el fundador y líder del Partido de los Trabajadores (PT), en alusión a las críticas de la oposición hacia la presidenta. “Los adversarios todo el santo día dicen mi nombre. Aprendí una cosa, sólo matas a un pájaro si se queda quieto, si se mueve no lo cazas. Yo volví a volar otra vez”, dijo, lo que desató la ovación en un auditorio colmado de personas en São Bernardo do Campo, la ciudad satélite de San Pablo en la que inició su carrera sindical y política.

El ex mandatario aseguró que no se siente insustituible en la política brasileña. “Todo hombre que se siente imprescindible, está naciendo un dictador dentro de él”, señaló. No obstante, aclaró que no es fácil crear nuevos líderes. “Brasil vive una lucha de clases que viene de arriba abajo, y responde a los prejuicios de la elite hacia los pobres y que se tradujo en el odio y en un proceso de criminalización del PT”, señaló Lula, en alusión a los escándalos de corrupción de Petrobras y otros por el que están enjuiciados varios dirigentes de la formación gobernante.


Lula- Brasil - El Pepe Mujica - Uruguay. Dos procesos políticos un solo destino estratégico, salir del dominio del neoliberalismo.

En línea con su anuncio de volver a los primeros planos, el ex mandatario defendió la reinstauración de la llamada Contribución Provisoria sobre los Movimientos Financieros (CPMF), un tributo conocido como impuesto al cheque, que ayudaría al gobierno a cerrar la brecha fiscal en 2016.

“No sé si es verdad que (el ministro de Salud, Arthur Chioro) defendió la CPMF. Pero es verdad que no debería haber sido anulada”, se lamentó Lula.

El gobierno de la presidenta Dilma considera recrear la CPMF, en medio de las dificultades financieras creadas por la caída de la recaudación en un contexto de debilidad económica. Se calcula que la brecha fiscal a cubrir en 2016 es de unos 130.000 millones de reales. Sin embargo, la posibilidad de reinstaurar la CPFM generó fastidio en algunos sectores del empresariado nacional y de la oposición en el Congreso. Esta semana, el ministro de Salud, Arthur Chioro, defendió una alícuota de 0,38 por ciento, al igual que la última que rigió cuando el impuesto fue anulado ocho años atrás.

Por su parte Mujica, quien presidió Uruguay entre 2010 y marzo de 2015, avaló las palabras de su colega brasileño. “En política no hay hombres imprescindibles, sino causas imprescindibles”, dijo. “Por más que sea un dirigente, nunca será tan grande si no tiene una columna de gente atrás que le dan fuerza”, manifestó el líder uruguayo, que integra el Frente Amplio-Encuentro Progresista. Mujica recalcó la importancia de los partidos políticos, sin los cuales “no hay democracia”. Sin embargo, advirtió sobre los peligros de la corrupción dentro de las formaciones. “Los partidos políticos también enferman, y pueden correr el riesgo de convertirse en agencias de colocación de puestos”, dijo Mujica, que viajó a Brasil el pasado jueves para ser galardonado y dar una serie de discursos.

El viernes, Lula afirmó que si es necesario para derrotar a la oposición, entrará en disputa por la Presidencia de la República. “Hay algo que debe quedar claro. Si la oposición piensa que va a ganar, que no va a haber disputa con el PT, que esté segura de lo siguiente: si fuera necesario, voy a la disputa, y voy a trabajar para que la oposición no gane las elecciones.”

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Brasil, violento y racista.
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Eric Nepomuceno

Brasil enfrenta, es verdad, una situación económica preocupante y, más grave aún, enfrenta una muy seria crisis política, que amenaza con transformarse en crisis institucional. Mucho se habla de la urgente necesidad de dar combate a una corrupción endémica e institucionalizada (que, a propósito, no empezó ahora y mucho menos con la llegada del PT al poder), y en lograr una manera para que el gobierno gobierne.

Pero, por encima de todo, Brasil vive desde siempre una crisis moral que no es admitida o reconocida por la sociedad, que insiste en mantener su cobarde hipocresía frente a sus propias llagas éticas.

En las cárceles brasileñas viven hacinadas 575 mil personas, según el censo del año pasado. Eso significa toda la gente que vive en una ciudad como la elegante y culta Salta, por ejemplo, y bastante más de la que vive en San Miguel de Tucumán.

En los presidios del país existen 355 mil plazas. Es fácil imaginar las condiciones en que esa sobrepoblación de 200 mil personas sobrevive.

En 2013 ocurrieron 53.646 asesinatos en Brasil. El año pasado, la policía brasileña mató a seis personas por día. Una cada cuatro horas. Las estadísticas no siempre son confiables pero, según los números disponibles, la policía brasileña es una de las cuatro que más mata en todo el mundo.

Hace un par de semanas, 19 personas fueron asesinadas aleatoriamente en la periferia miserable de San Pablo, la ciudad más rica de Sudamérica. Ninguna de ellas tenía antecedentes criminales. Todas estaban en bares o cafés conversando. Una de las víctimas, una chica de 16 años, estaba con una amiga en la vereda, delante de su casa de pobres. Fue la venganza de los policías por la muerte de un compañero, ocurrida en el mismo barrio días antes.

En junio, en Salvador de Bahía, la policía militarizada disparó y mató a 12 personas elegidas al azar. Días después, en Dias D’Avila, una pequeña ciudad a unos 60 kilómetros de Salvador, tres policías militares invadieron la casa de un hombre de 62 años. No querían detenerlo: querían dinero. Lo confundieron con un vendedor de marihuana. El hombre tenía algo así como 130 dólares. A los policías les pareció poco. Lo golpearon, lo violaron con una escoba, avisaron que volverían. El hombre los denunció a la Justicia, y los tres fueron detenidos. Ahora, el hombre vive bajo protección de la misma policía militar. ¿Estará protegido de verdad? De cada diez presos brasileños, cuatro esperan por una sentencia de la Justicia. Algunos, desde hace años. Y de cada diez presos brasileños, seis son negros o mulatos (en el total da la población, los censos indican que 51 por ciento son negros o mulatos).

De cada diez brasileños asesinados, casi siete son negros o mulatos. La policía es más selectiva. En cinco años, mató a 11.197 personas. Entre los muertos, 7823 eran negros o mulatos.

A los brasileños les encanta decir que en su país no hay racismo y que todos se integran a la sociedad. Los números indican que la cosa no es exactamente así. Y más: algunas iniciativas locales muestran que las medidas de prevención para la seguridad pública suelen estar dirigidas específicamente contra negros en primer lugar, y pobres en segundo, lo que es casi decir lo mismo.

En este invierno que fue especialmente benigno en Sudamérica, una novedad llegó a las playas doradas de la privilegiada zona sur de Rio de Janeiro: los buses que llegan de los suburbios lejanos y de calor agobiante, donde no hay mar, son revisados por la policía militar en su parada final, en Ipanema. Muchos grupos de adolescentes y jóvenes son enviados de regreso a sus casas, en otras dos horas de viaje.

El gobernador Luiz Fernando Pezao tiene una explicación que le parece lógica: “Vienen para robar y causar tumulto”. Claro: al fin y al cabo son pobres... y casi todos negros o mulatos.

Hace poco más de treinta años, en el verano de 1984, el entonces gobernador de Rio de Janeiro, Leonel Brizola, una de las principales figuras de la izquierda brasileña, hizo lo contrario: ordenó que las líneas de transporte público del suburbio se extendiesen hasta las playas de la zona sur. Desde entonces, miles de jóvenes suburbanos pudieron llegar, en los fines de semana, a la parte blanca y privilegiada de la ciudad.

Al principio, los moradores de la zona sur se rebelaron: de una hora a otra las playas de sus privilegios fueron invadidas por esa gentuza nada presentable, gracias a un gobernador autoritario.

Con el tiempo, se acostumbraron a la gentuza. Ahora, otro gobernador intenta corregir el equívoco que duró treinta años. Mientras no se institucionaliza la medida, la policía militar busca distraerse: los domingos, sus soldados pasean por la arena distribuyendo de manera igualitaria (siempre entre pobres, negros y mulatos) golpes de bastón para los que lograron salir de sus barriadas y se instalaron en la arena.

Un método bastante eficaz, hay que reconocer, para convencerlos de volver al lugar de donde salieron.

Y una muestra igualmente eficaz de hasta qué punto puede llegar la estupidez de una sociedad podrida: en su mayoría, los policiales militares son jóvenes pobres, negros y mulatos...


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sábado, 29 de agosto de 2015

LA NARCO POLÍTICA EN EL PERÚ: Los narcos y la política. Nuevas propuestas.

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LA NARCO POLÍTICA EN EL PERÚ: Los narcos y la política. Fuera los narcos de la Política.- Cuidado la semana que termina, el disparo con “dinamita política” fue de todos los ángulos y trincheras de la anti-política. Todos se acusan de narcos, todos señalan que en sus filas están desde “narco-indultadores”, “narco-chantajistas”, “narco-reducidores”, “narco-lavadores”, “narco-comunicadores”, “narco-juristas” hasta “narco-caballeros” y finalmente en el “altar” de los más representativos, se encuentran  los “narco-políticos”. La acusación sobre la narco-política ha sido el “telón de fondo” de la seudo-política en nuestra sociedad, que desastre y como increíblemente parece que nos hubiéramos puesto de acuerdo de ir todos “abrazaditos” hacia la anomia social. (Somos testigos mudos, como los pueblos, los barrios –Asentamientos humanos – cansados de la inoperancia de la Autoridad, y como se reproducen nuevas formas de sicarios y criminales a sueldo, ahora expresan públicamente hacer “justicia”  en forma directa. Cuidado nuevamente la violencia en compañía de la corrupción,  en todas sus formas nos está ganando. Hacemos oídos sordos “al clamor nacional” como detener la inseguridad ciudadana – las bandas armadas de criminales, - la economía criminal ( en todas sus formas visibles – minería ilegal, criminal, lavado de activos, tráfico ilegal de personas, explotación- formas de esclavitud – de niños en zonas del narcotráfico y la minería ilegal – y la CORRUPCION nos está ganando la guerra, e invisibles, personas, supuestamente distinguidas, empresas, corporaciones, los descubren con nuevas ilegales y criminales prácticas de corrupción.  Pero además, lo más perjudicial, la violencia irresponsable de los medios, las acusaciones están “llenas” de odio, violencia y liquidación del oponente.

Se olvidaron de la Política, la Democracia, desapareció por arte de birlibirloque el “término político” de Gobernabilidad ( seguro lo “desentierran” en tiempos del proceso electoral o que (in)surja un fuerte conflicto social, con la finalidad de criminalizarlo y defender los intereses del Poder y los poderes fácticos en general), en este escenario plagado por la violencia en todas sus formas, sin embargo, no hay, no existe, una mínima reflexión, hacia donde estamos caminando; en lo fundamental no han tenido en cuenta que de los 31 millones de peruanos, más del 70% son niños, jóvenes que esperan no insultos, no odio, no mentiras, no represión, NO Corrupción – visible e invisible”, sino un EJEMPLO de trabajo, participación, educación, la forja de una “nueva” Ciudadanía (participativa, multicultural, cívica y republicana) con nuevos Liderazgos Comunitarios, compromiso y responsabilidad en la construcción de un Nuevo Paradigma Nacional, de un “NUEVO PAIS HACIA EL BICENTANARIO NACIONAL”. Y nos seguimos preguntando: “Amigo – “pata del alma” – en qué momento se jodió el Perú?. Miren, como hemos desperdiciado una  nueva oportunidad para construir Nación, para forjar y construir Desarrollo Económico, Social, Sustentable a nivel nacional. Una nueva década perdida – una vez más nos recuerdan los tiempos del petróleo, de la minería, de la lana, de la pesca – otra vez una gran oportunidad destruida, una década de crecimiento económico sin futuro para más de 30 millones de peruanos, (pero sí de felicidad para el 1% de “peruanos” que se han beneficiado totalmente con el “viejo” modelo – herencia colonial – extractivo exportador de materias primas, y lo más terrible del nuevo desastre nacional, a amarrarse los pantalones, que vienen tiempos de “cólera absoluta”.


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LA NARCO POLÍTICA EN EL PERÚ: 
Los narcos y la política. Nuevas propuestas.
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Otra Mirada jueves 27 de agosto del 2015.

En el Perú, quince regiones se dedican a la producción de droga. El 60% de la producción de esta termina en el mercado norteamericano. El transporte de tal cantidad de droga se realiza a través de los 115 aeropuertos clandestinos ubicados estratégicamente en el territorio nacional. El narcotráfico mueve anualmente US$22 mil millones, lo que equivale al 17% de nuestro PBI. Estos son algunos datos que dio a conocer la Comisión Especial Investigadora Multipartidaria encargada de investigar y determinar la influencia del Narcotráfico en los Partidos Políticos y Movimientos Regionales y Locales, durante el simposio “Propuestas Legislativas contra la Narcopolítica”. Durante el evento no solo se expuso el trabajo conjunto realizado en el último año, sino que se presentó alrededor de 20 proyectos de ley cuyo fin es combatir el narcotráfico.

La comisión, presidida por la legisladora Rosa Mavila, realizó más de 40 sesiones y entrevistó a más de 35 investigados y especialistas. El informe final, que muestra la gravedad de la situación actual que enfrenta el Perú en la lucha contra el tráfico de drogas, ha logrado identificar hasta diez formas en las que se infiltra el narcotráfico en la política peruana. Algunas de ellas son la penetración en los sistemas de justicia y la policía, la infiltración en la política local/regional, la generación de complejas redes empresariales, entre otras.

A la ley aprobada la semana pasada respecto al derribo de avionetas se suman nuevos proyectos que buscan atacar el problema del narcotráfico a través de medidas específicas. Porque no basta con aumentar las penas a los acusados por este delito, hay que atacar los puntos sensibles que permiten que prolifere la producción y comercialización de droga. Para eso se han enfocados en cuatro ejes: el sistema de administración de Justicia Penal, el sistema electoral, los ámbitos del transporte aéreo y marítimo, y el sub sistema penal y procesal penal.  Participaron del simposio, además, los congresistas Yehude Simon, Esther Saavedra, Agustín Molina, Julia Teves, Elard Melgar, así como el asesor principal Ricardo Soberón y los asesores adjuntos.
Los proyectos de Ley

Con respecto a la administración de Justicia Penal, se propuso la ley que modifica el nombramiento, ratificación y destitución de magistrados por parte del Consejo Nacional de la Magistratura, para que se notifique de manera oportuna los fallos de los jueces y fiscales en casos de narcotráfico y lavado de activos. Asimismo, se planteó la prohibición del cierre temporal de comisarías y puestos policiales en zonas de alta vulnerabilidad por presencia del narcotráfico, así como la creación de oficinas de prevención contra el narcotráfico al interior del país.

Dentro del eje de reforma electoral se destacó la responsabilidad de los políticos en la lucha contra el narcotráfico. Por ese motivo, se propuso la creación de fiscalías  provinciales ad hoc que se encarguen de investigar los aportes y gastos de los candidatos a las alcaldías y gobiernos regionales, así como a sus partidos políticos, durante la campaña electoral, principalmente en las zonas de alta vulnerabilidad, como el VRAE. Esta labor se realizaría de manera conjunta con la ONPE. Se espera que la medida contribuya a la transparencia en el financiamiento de nuestras autoridades.

Uno de los temas de mayor relevancia para la Comisión es el que concierne al control terrestre, aéreo y marítimo. Así, se propuso la Ley de Control de Equipaje, Carga y Pasajeros en todo tipo de transporte con el fin de que las empresas dedicadas a este rubro asuman responsabilidad y se acabe con el traslado impune de droga. Por otro lado, se planteó la creación de la Escuela de Estibadores del Perú, cuya finalidad será formar y capacitar a quienes realizan esta labor en los principales puertos del país. Ello permitiría eliminar las mafias que operan en los puertos y evitaría el tráfico de droga a través de contenedores. También se expuso el proyecto que declara de interés público la implementación de hospitales dentro de los aeropuertos para realizar los operativos antidrogas. Además, se planteó modificar la Ley General de Aduanas, para que se autorice el ingreso a las zonas primarias de los puertos,  aeropuertos, terminales terrestres y  almacenes aduaneros a la policía.

En lo que concierne a la reforma penal y procesal penal, se propuso responsabilizar de manera civil, penal y administrativa a quien destine bienes al tráfico de drogas e insumos químicos. Adicionalmente, se dio a conocer el proyecto de ley que tiene como objetivo prohibir la mutilación, incineración, destrucción o desaparición de documentos y pruebas de procesos judiciales seguidos por tráfico ilícito de drogas, lavado de activos y comercialización de insumos químicos. Estas son solo algunas de las medidas presentados durante el simposio. Se espera que en las próximas semanas sean revisadas y aprobadas por el Legislativo.

La comisión pidió a los políticos que se le dé prioridad a estas propuestas, para poder frenar lo antes posible el flagelo del narcotráfico. Acabar con él requiere, más allá de grandes propuestas, voluntad política. Los proyectos de ley están sobre la mesa, es momento de ponerlos en discusión y pronta ejecución.


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viernes, 28 de agosto de 2015

PABLO GONZÁLEZ CASANOVA: CUBA ES HUMANIDAD. Dr. en Sociología y ex Rector de la UNAM.

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Hoy, en Cuba vive un pueblo cuya conciencia se ha convertido en voluntad, su voluntad en inteligencia y su inteligencia en organización. Y si semejante afirmación parece exagerada piénsese por qué Cuba, no sólo ha logrado resistir durante más de medio siglo el bloqueo y las numerosas agresiones de que ha sido objeto, sino en este año de 2015 en que todos los países del mundo son capitalistas, y en que ya todos los que fueron o se dijeron socialistas han restaurado abierta y hasta agresivamente el capitalismo, Cuba es el único que sobrevive en medio de esa tragedia humana. Y es que la Revolución Cubana, lejos de ser la última marxista-leninista (ya debemos acostumbrarnos) es la primera de un nuevo tipo de revoluciones que inició el “26 de Julio”. En ella, no fue sólo un decir que José Martí es el autor intelectual de la Revolución Cubana; es el impulsor histórico de la actual moral de lucha y cooperación, y de coherencia impresionante entre lo que se dice y se hace. La moral fuerza es, además, una fuente motriz que a partir del pensar de los actores, en lucha por su propio país, los lleva a seguir aquel otro precepto de inmenso valor: el de “Patria es Humanidad”. Al postularlo enriquece el enlace del internacionalismo proletario y la inmensa cultura en que destacan Marx, Lenin, el Che y, a la cabeza ayer y hoy, el propio Fidel.

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PABLO GONZÁLEZ CASANOVA: 
CUBA ES HUMANIDAD.
Dr. en Sociología y ex Rector de la UNAM.
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Pablo González Casanova.*

ALAI. América Latina en Movimiento.

Miércoles 26 de agosto del 2015.

Entre los muchos problemas que enfrentamos a nivel mundial se encuentra el fin del cruel bloqueo de Cuba por Estados Unidos –un bloqueo que duró más de cincuenta años-. La reanudación de relaciones diplomáticas, familiares, turísticas, comerciales, culturales y financieras entre ambos países nos provoca una mezcla de júbilo por el cese de la agresiva medida y una natural preocupación sobre la mejor forma de seguir construyendo y luchando por la libertad, el socialismo y la emancipación.

Los avances de Cuba durante estos cincuenta años son por todo el mundo reconocidos. En medio del cerco y los incesantes asedios del imperio, la pequeña Isla del Caribe logró uno de los primeros lugares en la lucha contra la desigualdad y por la seguridad social; alcanzó los más altos índices de alfabetización y escolaridad, realizó la más profunda reforma agraria y dio uno de los más fuertes apoyos económicos y técnicos a los agricultores y trabajadores del campo; consiguió una reducción óptima del desempleo; redujo la criminalidad de delitos del orden común y dio un grado de seguridad interna a sus habitantes, poco común en otros países; alcanzó altos niveles en la educación universitaria así como en la preparación de técnicos, ingenieros, médicos y otros profesionales; impulsó las artes y las ciencias y realizó numerosos descubrimientos científicos reconocidos a nivel internacional, sobre todo en el terreno biológico y en la medicina. Música, ballet, teatro, cine y otras bellas artes, así como innumerables deportes, merecieron un fuerte impulso del Estado.

Pero si todos esos logros son innegables y realmente impresionantes, desde el punto de vista de la emancipación humana, para muchos no son de creer.

Hoy, en Cuba vive un pueblo cuya conciencia se ha convertido en voluntad, su voluntad en inteligencia y su inteligencia en organización. Y si semejante afirmación parece exagerada piénsese por qué Cuba, no sólo ha logrado resistir durante más de medio siglo el bloqueo y las numerosas agresiones de que ha sido objeto, sino en este año de 2015 en que todos los países del mundo son capitalistas, y en que ya todos los que fueron o se dijeron socialistas han restaurado abierta y hasta agresivamente el capitalismo, Cuba es el único que sobrevive en medio de esa tragedia humana. Y es que la Revolución Cubana, lejos de ser la última marxista-leninista (ya debemos acostumbrarnos) es la primera de un nuevo tipo de revoluciones que inició el “26 de Julio”. En ella, no fue sólo un decir que José Martí es el autor intelectual de la Revolución Cubana; es el impulsor histórico de la actual moral de lucha y cooperación, y de coherencia impresionante entre lo que se dice y se hace.

La moral fuerza es, además, una fuente motriz que a partir del pensar de los actores, en lucha por su propio país, los lleva a seguir aquel otro precepto de inmenso valor: el de “Patria es Humanidad”. Al postularlo enriquece el enlace del internacionalismo proletario y la inmensa cultura en que destacan Marx, Lenin, el Che y, a la cabeza ayer y hoy, el propio Fidel.

De la junta de humanismos surge una manifestación Latinoamericana del socialismo, que entre sus variadas fuentes cuenta con el liberalismo radical y otros humanismos que incluyen al Padre Varela y al humanismo cristiano que más tarde, y por su parte, se expresa en la teología de la liberación. Esa es la realidad, si nos dejamos de mitos y de dogmas; esa es la esperanza, si ahora repensamos lo que pasó y por lo que se luchó y consideramos lo que puede pasar, y por lo que se debe luchar.

Los hechos son ciertos y las propuestas vienen de un futuro que ya llegó. El futuro que entrevemos nos permite explorar el qué hacer y el cómo hacerlo. Primero nos lleva a fijarnos en el momento que vivimos y a reparar en la política que sigue el complejo empresarial-militar-político y mediático de Estados Unidos de Norteamérica. De inmediato advertimos que en este mismo momento Estados Unidos está pasando más y más a la ofensiva en su proyecto globalizador neoliberal. Sus triunfos son innegables en la Unión Europea, donde ya es el jefe militar de la OTAN y en que con la lógica de “la eficiencia” hace que los Jefes de Estado impulsen por sentido común las empresas de la paz y la guerra, e impongan más y más la política neoliberal de la “acumulación por desposesión” o saqueo, que Estados Unidos encabeza.

Día a día más obsecuentes y sujetos a Estados Unidos. Los países dominantes en la Unión Europea no sólo se pliegan a su creciente fuerza financiera, militar, política y mediática, sino que destruyen su propio proyecto de una Europa Unida con sus presiones sobre Italia y España y su cruel maltrato de Grecia.

Desconocimiento y descalificación de la democracia en Grecia, acaban de convalidar su inexorable imperio financiero sobre los países endeudados a quienes habían ya impuesto una política fiscal, financiera y monetaria que los llevaba al abismo de la deuda pública y a romper el compromiso de mantener un equilibrio presupuestal. Su creciente asedio a los partidos que proponen una política socialdemócrata está desprestigiando a éstos de tal manera que al “fin de las ideologías” se añade cada vez más el fin de los partidos que luchan por resolver los problemas sociales y nacionales y no cumplen en nada. Que esa responsabilidad es atribuible a la propia Europa y a sus clases dominantes, desde la tristemente famosa Thatcher mal llamada dama de hierro, no cabe duda, pero que seguir esa política primero impulsada por Estados Unidos con Pinochet en Chile, nos presenta un panorama en que el predominio de Estados Unidos es cada vez mayor, y en que ante el desprestigio de los partidos con membrete de izquierda tiende a suceder --entre los desheredados, los pequeños propietarios y el “Lumpen”--el predominio de nuevos líderes y clientelas neofascistas, como ya ocurre en Francia y se manifiesta cada vez más en Estados Unidos.

En medio de una crisis a la vez financiera, económica, ideológica y política –en que no deja de tener un peso inmenso la restauración del capitalismo en Rusia y China, los demás países gran “campo socialista” y los gobiernos de la Trilateral y de Bandung-, los proyectos globalizadores adquieren un carácter particularmente violento con la resistencia que muestra Rusia a ser tratada como si fuera una república bananera y hace alarde para ello de su inmenso poderío nuclear.

Lejos de detenerse, la política de la globalización continúa y juega con el individualismo y con la lucha de clases para su cosecha. El “individualismo”, el clientelismo, el particularismo, el sectarismo constituyen un arma de muchos filos capaz de destruir las luchas de liberación y las de la clase obrera y los pueblos despojados y oprimidos o, las más amplias de los pueblos por sus soberanía y las de los trabajadores que se limitan a la defensa de sus derechos, o las de las de las comunidades por sus territorios y su autonomía, o las más antiguas por la Patria Chica, la Patria Grande y la Humanidad, a las que dividen y enfrentan para vencerlas.

Parecida fuerza a la del individualismo tiene otra arma que en términos genéricos es la corrupción. En ella destacan la colusión, la cooptación, el soborno, el cohecho, el mercado negro y sus mercaderes de mayoreo, y hasta llega a quienes usan la economía informal para resolver problemas apremiantes que los llevan a ceder y comprar artículos de primera necesidad y que no por ello dejan de desmoralizar a una parte de la población que tiene parecidas carencias y menos o ningún recurso. La profusa y seductora publicidad que al mismo tiempo hace la sociedad de consumo –sin aclarar que del mismo sólo goza una mínima parte de la población- llega a despertar sueños ilusos sobre todo entre los jóvenes que no vieron ni vivieron la inmensa miseria en que estaba Cuba antes de la Revolución, y la que vive la inmensa mayoría de la humanidad. La publicidad -con el individualismo y la corrupción-, es la mejor arma del Complejo empresarial militar.



Allí no queda todo. La globalización neoliberal está extendiendo y acentuando el uso de otra de sus armas principales: la privatización.

La privatización es −como el individualismo y la corrupción− un arma de muchos filos que se utiliza en formas abiertas y encubiertas, legales e ilegales, y en este momento hegemónicas entre los dirigentes de los complejos y corporaciones dominantes, y en los asociados a ellos y sus subalternos, o que dependen de ellos y dominan en todos los continentes del mundo.

Los promotores y protectores de la privatización, en este mismo momento, están proyectando −con los gobiernos de cincuenta países− aumentar todavía más el poder y la propiedad de los señores y dueños que tienen como móvil la maximización de utilidades y riquezas. Según la prensa, los gobiernos de cincuenta países se están reuniendo en secreto para elaborar un plan de privatización de todas las actividades económicas a su alcance. Quieren llevar al máximo y a la organización global un proyecto de por sí ya muy avanzado: que las corporaciones tengan a su cargo toda la producción, la distribución, el intercambio, los servicios y el consumo que en el mundo existe.

Imaginar cómo sería un mundo así sería pensar en un inmenso quiebre histórico en que sobre la contradicción entre las fuerzas y las relaciones de producción se montaría la contradicción entre las fuerzas de represión y las relaciones de represión, fenómeno que de por sí ya se está dando con la construcción de soldados que son robots y que tienen capacidad de distinguir (eso piensan sus productores) a quienes deben eliminar y a quienes deben respetar e incluso defender.

Pero no es necesario imaginar semejantes peligros para reconocer aquéllos a que ya nos enfrentamos y de que hay amplias y repetidas pruebas. No me refiero sólo al cambio climático y sus consecuencias para la vida en la Tierra, ni sólo me refiero a la gran cantidad de bombas nucleares y sistemas de lanzamiento que numerosos países tienen con muchos de sus gobernantes y ayudantes que rezuman una creciente cultura del odio, del sectarismo racial, religioso, machista, sádico, xenófobo, por lo demás bien armado y bien provisto de municiones y sustancias letales cuyos productores y proveedores gozan de buena salud y bella vida.

Todo ocurre en medio de supuestas religiones que ni sus rituales cumplen ni sus sagrarios dejan a salvo. Se da con un terrorismo natural y comercial que al amparo de las corporaciones y gobiernos rinde beneficios billonarios de que las huestes no gozan, empeñadas como están en destruirse unas a otras y en destruir sobre todo pueblos, presas, calles, casas, ciudades y zonas arqueológicas de sus propios antepasados.

Esos horrores acostumbrados, y muchos más, que hasta los científicos y especialistas de las comisiones intergubernamentales convalidan, son mirados e incluso negados, de la manera más irresponsable que quepa imaginar, por los ideólogos y apologistas del sistema y por sus víctimas subalternas en quienes también domina una especie de patología cognitiva, que hasta los lleva a perseguir, con todos los descalificativos, y por todos los medios a su alcance a quienes no ven como inevitable el ecocidio antropogénico que amenaza la vida en la Tierra.

Crisis ecológica y crisis social plantean la inminente necesidad de otra organización del trabajo y de la vida en el mundo, en que no predomine la lógica y la cultura de la maximización de utilidades y riquezas sino la que en busca de la libertad humana se desarrolló desde los inicios del capitalismo mercantil y usurario, y en la cultura, desde el Renacimiento y la Ilustración hasta el nuevo pensamiento revolucionario, que con Cuba y los Zapatistas, encabeza hoy en Roma el Papa Francisco, y que es cultivada cada vez más por esa juventud que empezó a andar en l968 y a la que hereda la que hoy no sólo va a prever el futuro sino va a vivir el futuro.

Es en estas condiciones como se advierte que Cuba no debe limitarse a una cultura de la resistencia, sino desempeñar como Estado Nación, un doble papel mundial que ningún otro país puede realizar, y es, en primer lugar, el de ser la sede de encuentros entre las fuerzas que luchan en su tierra por un mundo mejor y que no por haber recurrido a las formas violentas porque les niegan el derecho de luchar en formas pacíficas, dejan de estar dispuestas a negociar y a defender en formas pacíficas el interés general de comunidades, ciudadanos, pueblos y trabajadores. La experiencia cubana en ese terreno –así como en la resistencia y construcción del socialismo y sobre todo la verdadera democracia y soberanía de esa nación- hace de ella la Isla de la Tierra más adecuada para dar hospitalidad a semejantes tareas.

A la enorme capacidad que tiene Cuba para contribuir a resolver ese proyecto se añade otro no menos sino igual o más importante. En Cuba puede darse la última tabla de salvación para la vida humana y emprender la creación de un organismo autónomo mundial en que los expertos más destacados y responsables de las variadas posiciones críticas y científicas que existen en el mundo diseñen los modelos de una transición pacífica a un modelo de organización de la vida y el trabajo que asegure la vida en la tierra y aleje los actuales peligros de destrucción de la biósfera y del ecocidio.

Que semejantes proyectos suenen a pura ilusión, ingenuidad y utopía es un juicio digno de reconsiderar ahora que se acaba un cruel bloqueo que duró más de medio siglo y más de veinte años de la restauración mundial de países que se decían socialistas y cuyos dirigentes han llevado a cabo la acumulación primitiva más cuantiosa de toda la historia.

Que la revolución cubana es del todo diferente es algo que no se necesita probar porque ya se probó. Sus nuevas relaciones con Estados Unidos se dan sin que la doblaran ni la quebraran.

Es hora de la utopía, del proyecto que no parece realista y que es el único que puede salvar --con la libertad-- la vida en nuestro planeta. Toda la historia de la emancipación y de la humanidad ha empezado con utopías. Esta no será la excepción.

Las utopías abrieron metas sin saber cómo seguir. Por eso y para pensar qué hacer y cómo hacer es necesario por lo pronto luchar por la paz y prepararse para la guerra defensiva, por si acaso. Y hacerlo sin esas divisiones de intereses que hicieron perder a Espartaco.

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- Pablo González Casanova es Ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).


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